El presidente Luis Arce fortaleció la política de exploración de recursos naturales como una prioridad nacional para garantizar la seguridad energética y el desarrollo soberano del país. Bajo su liderazgo, Bolivia reactivó proyectos de exploración hidrocarburífera y mineral en distintas regiones, con un enfoque responsable y con beneficios para las comunidades.

El Gobierno amplió las fronteras de exploración con inversiones públicas y alianzas estratégicas que permitieron identificar nuevos yacimientos de gas, litio, oro y tierras raras. Estas acciones no solo diversificaron la matriz productiva, sino que también proyectaron a Bolivia como un actor clave en la transición energética global.

Luis Arce promovió una exploración con visión de futuro, respetando el medioambiente y fortaleciendo el rol del Estado en la gestión de los recursos estratégicos. Gracias a esta política, Bolivia recuperó confianza en su potencial geológico y sentó las bases para una economía con más ingresos, más oportunidades y mayor soberanía.